Cuando las cosas van bien, es fácil ser amigo,como se suele decir " para una caña vale cualquiera"...Pero, cuando las cosas se tuercen, cuando damos un paso en falso, cuando algo horrible te sucede y quieres que te trague la tierra y te sientes solo y no sabes qué camino andar...y tienes a tus amigos ahí para darte una mano, para recordarte cómo eres persona, cómo reias con ellos, y cómo te quieren, para eso no es tan sencillo ser amigo. He de decir que ante tales circunstancias y a un año de todo lo horrible y monstruoso que pasé tengo grandes AMIGOS que pusieron sus manos sobre las mias para tirar. Aquella tarde en aquel bar de Fuenlabrada, lloramos y conté muchas cosas, y estaban ellos. Y el verano juntos de aquí para allá sin tregua ni condición, estaban a mi lado. Y tantas cenas hasta las mil llorando y estaban ellos escuchando.Y cariño para mi hijo...Y dando, dando...siempre dando...
Ahora miro atrás y digo "JA!" y les miro y les cuento como ayer, mi ilusión, y veo sus caras de alegría y se que mi ánimo y mi felicidad en parte, depende un tanto de ellos. Y apoyo, otra vez tengo todo su apoyo incondicional, para esta aventura fantástica que hoy me llena de satisfacción y felicidad que tengo entre manos y para cualquier cosa, porque se que son mis amigos los de verdad y sólo puedo decir GRACIAS, os quiero!!
Y para tí:
Anda,
dime lo que sientes,
no temas si me mata,
que yo sólo entiendo
tus labios como espadas,
y ven a mis brazos,
dejemos los datos,
seamos un cuerpo enamorado.
http://es.youtube.com/watch?v=vpyLutCN9ho
Dulce sábado...
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