En el sueño, o mejor dicho en mi pesadilla, estaba allí, sentada con mi carpeta en la mano. Las había de todos los colores a mi alrededor y la vida chorreaba por las sillas, se olía en el ambiente mezclada con un olor a tristeza, a aquella que trae algo cuando menos te lo esperas.Parecía que jugar con la vida y la muerte era sencillo allí, de esta manera...para mí no, desde luego...
Me llamaron como a otra, y así me sentí: como si nada de aquello tuviera que ver conmigo, a mi que no me miren que yo estoy aquí de paso, pero no era cierto, en ese momento, era una más. Y quiso mi pesadilla que así fuera. Y entré. Fue rápido y confuso, como siempre pasa con los sueños...y la noche larga con eso dentro que ni sale ni se queda.Luego el desgarro,rojo, redondo, como una patata...y Yermas llorando en la calle...
YERMA. (Como soñando.)
¡Ay qué puerta cerrada a la hermosura,
que pido un hijo que sufrir y el aire
me ofrece dalias de dormida luna!
Estos dos manantiales que yo tengo
de leche tibia, son en la espesura
de mi carne, dos pulsos de caballo,
que hacen latir la rama de mi angustia.
¡Ay pechos ciegos bajo mi vestido!
¡Ay palomas sin ojos ni blancura!
¡Ay qué dolor de sangre prisionera
me está clavando avispas en la nuca!
Pero tú has de venir, ¡amor!, mi niño,
porque el agua da sal, la tierra fruta,
y nuestro vientre guarda tiernos hijos
como la nube lleva dulce lluvia.
http://es.youtube.com/watch?v=6FOe1cDjzVU, gracias una vez más por todo y por todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario